- Te quiero...
PIP PIP PIP PIP
El ruido del teléfono cuando cortó la llamada, hacía eco en las paredes de mi casi vacío corazón. Cada tono desprendía un poco de mi alma y hacía añicos lo que me quedaba de viva. Liberandome del dolor. Dejandome vacía, sin esperanza.
El ruido del teléfono cuando cortó la llamada, hacía eco en las paredes de mi casi vacío corazón. Cada tono desprendía un poco de mi alma y hacía añicos lo que me quedaba de viva. Liberandome del dolor. Dejandome vacía, sin esperanza.
Por fin el tan ansiado descanso llegó. Cerré los ojos y me dormí con los rastros de las últimas lágrimas que lloraría en el rostro.
No hay comentarios:
Publicar un comentario